¿Has usado alguna vez un comparador de viajes para planificar tus vacaciones? ¿Crees que es una buena opción para ahorrar o tienes miedo a las sorpresas de la letra pequeña?
Te presentamos algunas de las cosas que deberías saber sobre ellos antes de añadirlos a tu maleta de viaje.
Lo bueno
- En un clic tienes accesos a múltiples oportunidades de vuelos, alojamientos o trenes de forma rápida y gratuita.
- Te ofrecen búsqueda avanzada de ofertas, pudiendo filtrar no sólo por fechas y destino sino también por precios, aeropuertos, compañía o si quieres hacer escala o no.
- Algunos de ellos tienen su propio sistema de reservas de forma que no tienes que moverte a la web de la compañía o marca original para comprar la oferta por la que te has decidido.
- Te dan la oportunidad de registrarse a su newsletter de forma que puedas estar al tanto de nuevas oportunidades e incluso de promociones o descuentos especiales.
- Suelen ser bastante intuitos y sencillos, no te vas a hacer un lío para encontrar lo que estás buscando.
Lo menos bueno
- Algunos de ellos no dejan clara la información de costes añadidos como la facturación de maletas, gastos de gestión o recargos por pago con tarjeta.
- A veces hay cambios de precios porque las aerolíneas actualizan sus tarifas antes que los comparadores, así que acuérdate de actualizar el precio de tu oferta.
- El formato en el que te presentan los resultados es “poco atractivo”, en algunos casos tendrás que estar haciendo scroll para llegar a lo que te interesa .
- A menudo tienes que tener flexibilidad de fechas y/o aeropuertos para poder encontrar una oferta realmente interesante.
